El Ministerio de Salud, Trabajo y Bienestar Social de Japón se reunirá el próximo 15 de diciembre con un comité especial para decidir la aprobación o no de la solicitud de la farmacéutica estadounidense Moderna para usar su vacuna como la tercera dosis de refuerzo.
Si el gobierno aprueba el pedido de Moderna permitirá también la “vacunación mixta”, es decir el uso de una inyección de marca y fabricación diferentes a la recibida en las dos primeras dosis. En Japón, más del 70% de las dos primeras vacunaciones fueron realizadas con la Pfizer.
Preocupado por la aparición de la nueva variante Omicron, Japón quiere ampliar las opciones de vacunación, mientras considera acortar el intervalo de inoculación entre la segunda y la tercera dosis que ahora es de ocho meses o más.
Según datos oficiales, Japón tiene un inventario de 22 millones de vacunas Moderna y está previsto que reciba otras 75 millones de dosis en el primer semestre de 2022. (IP/PJ/NI/)
