Toyota Motor anunció hoy que su producción global en diciembre alcanzará las 800.000 unidades, más que las 760.000 fabricadas en el mismo mes que en 2020, aunque menos que los 980.000 vehículos que habían sido proyectados en un inicio.
Debido al estancamiento del suministro de piezas por el coronavirus en el sudeste asiático, varias fábricas en Japón se vieron obligadas a suspender sus líneas, aunque para diciembre se volverán a abrir las 28 líneas que tiene en sus 14 plantas nacionales por primera vez en siete meses. La previsión de 9 millones de unidades para el año fiscal que termina en marzo de 2022 se mantiene.
Toyota había anunciado que reduciría la producción de septiembre a octubre en un 40% respecto al plan original. Con esta reducción la producción anual calculada en 9,3 millones de vehículos se fijó en 9 millones.
A principios de noviembre, Toyota dijo que disminuiría su producción en aproximadamente 150.000 unidades respecto al plan revisado y que este mes fabricaría entre 850.000 y 900.000 unidades.
Sin embargo, Toyota revisará a la baja el volumen de producción de diciembre a alrededor de 800.000 unidades, aunque insiste en mantener su proyección de venta anual. Para lograr su meta, la compañía requerirá de un aumento significativo de la producción entre enero y marzo de 2022.
Consultado sobre esta posibilidad, un importante ejecutivo de un proveedor afiliado a Toyota dijo que “debido a que entre enero y febrero hay menos días hábiles, la perspectiva de producción de 9 millones de vehículos será bastante dura de cumplir”. (RI/NI/)
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