Mientras el coronavirus continúa expandiéndose en Japón (más de 3.200 casos el miércoles, una cifra récord), el Ministerio de Salud está definiendo el cronograma de vacunaciones y a qué sectores priorizará.
El ministerio ha elaborado un proyecto de plan que además de establecer el orden en que se aplicará la vacuna, especifica qué afecciones preexistentes se tomarán en cuenta para determinar las prioridades.
Los trabajadores médicos comenzarán a ser vacunados a fines de febrero, mientras que los ancianos (personas de 65 años o más) a fines de marzo, según la NHK.
Después de ellos, recibirán la vacuna las personas hospitalizadas o con afecciones preexistentes (enfermedades crónicas del corazón y renales, trastornos respiratorios, cáncer y apnea del sueño, entre otros), y la gente con un índice de masa corporal de 30 o más.
Se estima que el número de adultos obesos o con afecciones preexistentes es de 8,2 millones de personas.
Los enfermos crónicos no deben presentar ningún certificado que acredite su condición para recibir la vacuna, basta con que llenen un formulario.
El proyecto elaborado por el Ministerio de Salud será entregado a un panel de expertos el viernes. (International Press)
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