Una japonesa de 35 años ha sido arrestada hoy por lanzar a su bebé recién nacido a un canal de agua en un parque de la calle Okuda Honmachi, en el distrito Kita de la ciudad de Okayama.
Alrededor de las 21.00 horas de ayer martes, una transeúnte que pasaba por el parque se percató de que un pequeño cuerpo estaba flotando en el canal y dio aviso a la policía.
Se trataba de una bebé recién nacida de unos 50 cms, fue trasladada al hospital donde la declararon muerta.
Se encontraron manchas de sangre en la banca del parque donde la madre habría dado a luz. La inspección de la sangre ayudó a dar con el paradero de la mujer, una residente de la misma ciudad.
Ella ha admitido haber arrojado a la bebé al canal con la intención de que se ahogue y según la televisión local, ha dicho que su esposo no sabía que estaba embarazada. (International Press)
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