Las llamadas de teléfonos móviles recibidas en Japón desde números telefónicos internacionales con códigos de países inexistentes aumentaron en septiembre en un presunto fraude de facturación que apunta a chinos.
Según expertos de la empresa de seguridad cibernética, Tobila Systems, citados por la agencia Kyodo, las llamadas parecen ser realizadas por un programa bot dirigido a residentes chinos en Japón, aunque muchos japoneses también las recibieron.
Se ha instado a los usuarios a no contestar llamadas de códigos internacionales sospechosos ni mucho menos devolver las llamas.
Las llamadas investigadas comienzan con prefijos de países inexistentes como “+83” y “+422” que comenzaron a llegar por primera vez en agosto. En un día de septiembre se registraron más de 5.000 llamadas a teléfonos que Tobila System y la policía japonesa hacían seguimiento.
Una mujer china de 40 años de la prefectura de Akita, al noreste de Japón, se vio obligada a pagar una cuenta de 4,11 millones de yenes (US$39.000) después de responden una llamada el pasado 10 de septiembre desde un código fraudulento “+885”. (Agencia)
Be the first to comment