La muerte de dos pacientes infectados por coronavirus que esperaban en sus casas una cama en hospitales de Saitama, ha obligado a las autoridades a asumir responsabilidades y cambiar la forma de atención de las personas que han dado positivo.
El gobernador de la prefectura, Motohiro Ono, dijo: «es nuestra responsabilidad haber llegado a esta situación».
El día 21 se confirmó en la ciudad de Shiraoka la muerte en su casa de un hombre infectado por coronavirus. El hombre de unos 50 años estaba esperando una cama libre para ser internado en un hospital.
Pero ayer, 23 de abril, se descubrió que otro hombre de unos 70 años también había muerto días antes en su casa, por el mismo motivo, sin que las autoridades reportaran el hecho. Este hombre, vecino de Higashimatsuyama falleció el pasado 14 de abril.
El gobernador Ono, prometió aplicar medidas urgentes para que los pacientes leves puedan ser aceptados lo más pronto posible en hoteles designados o en lugares de alojamiento.
Hasta las 18.00 horas del día 23 de abril, la prefectura de Saitama tenía 357 personas infectadas esperando en sus casas camas libres en los hospitales de la prefectura. (International Press)
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