En 2019 se vendieron 5.195.216 automóviles nuevos en Japón, un 1,5 % menos que en 2018, informó Kyodo.
La caída registrada en 2019 fue la primera en tres años.
¿Las causas? La demanda de vehículos nuevos se ralentizó debido a los desastres naturales que golpearon a Japón (tifones en septiembre y octubre) y la subida del impuesto al consumo de 8 a 10 % en octubre.
Las ventas de Nissan sufrieron una fuerte caída de 13,8 % a 367.514 unidades. Aparentemente el caso Ghosn (expresidente de la compañía arrestado por irregularidades financieras, puesto en libertad bajo fianza y hoy prófugo de la justicia japonesa) ha afectado al fabricante japonés.
Honda también registró una disminución de sus ventas: 5,4 % a 357.242 unidades.
Distinto fue el caso de Toyota, el principal fabricante de coches en Japón, cuyas ventas subieron un 2,7 % a 1.510.741.
Las ventas de minivehículos (muy populares en Japón, vehículos con motores de hasta 660 cc) descendieron un 0,7 % a 1.910.346 unidades. (International Press)
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