El ministro de Relaciones Exteriores japonés, Taro Kono, habló el jueves por teléfono con el secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, antes de una segunda cumbre entre Estados Unidos y Corea del Norte programada para la próxima semana.
Las conversaciones se produjeron un día después de que los líderes de los dos países acordaron en una conversación telefónica cooperar para abordar los problemas relacionados con Corea del Norte, en una aparente muestra de una coordinación más estrecha entre los aliados de larga data.
Se espera que el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, se reúna con el líder norcoreano, Kim Jong Un, los días 27 y 28 de febrero en Vietnam, con la atención puesta en que si su segunda cumbre producirá un progreso tangible hacia la desnuclearización completa de la península coreana.
Trump ha dicho que no tiene prisa de que Corea del Norte se desnuclearice e insinuó una tercera cumbre entre Estados Unidos y Corea del Norte, aparentemente frenando las expectativas sobre la próxima reunión de Hanoi.
A pesar del compromiso de Kim de trabajar hacia la «desnuclearización completa» durante la primera cumbre en Singapur en junio, aparentemente existen diferencias entre los Estados Unidos y Corea del Norte sobre la forma en que debe realizarse.
Washington exige que Pyongyang desmantele su arsenal con verificación internacional, pero Pyongyang rechazó entregar una lista de sus instalaciones nucleares y de misiles.
Además de la desnuclearización, Japón quiere ver un progreso en la resolución del problema de los secuestros de ciudadanos japoneses por agentes norcoreanos en las décadas del 70 y 80, lo que ha impedido la normalización de las relaciones diplomáticas entre Tokio y Pyongyang.
Durante la conversación telefónica del miércoles, Trump le prometió al primer ministro japonés, Shinzo Abe, que daría prioridad a la solución del problema del secuestro. (International Press)
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