El 9 de septiembre pasado, en una estación de tren en Osaka, un pasajero se dio cuenta de que un policía estaba grabando debajo de la falda de una mujer con un teléfono mientras subían por unas escaleras.
El hombre amonestó al policía, que intentó huir. Ambos forcejearon y el pasajero cayó al suelo lastimándose el codo.
La policía de Osaka arrestó al mal agente, identificado como Manato Naruse, por la agresión y su acto de perversión, según Japan Today.
El incidente ocurrió en la estación de Nipponbashi.
El policía de 22 años admitió su culpabilidad. Dijo que fue pillado in fraganti y que “solo quería escapar». (International Press)
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