El terremoto de magnitud 6,7 que golpeó a la isla de Hokkaido el jueves pasado ha causado la muerte de al menos 40 personas, informó la NHK.
36 personas murieron en el pueblo de Atsuma, víctimas de derrumbes que destruyeron casas y cubrieron carreteras y arrozales de una gruesa capa de barro.
Las cuatro restantes fallecieron en las ciudades de Sapporo y Tomakomai y los pueblos de Mukawa y Shinhidaka.
La última víctima mortal fue encontrada el lunes en la mañana. Era un hombre de 77 años que había sido reportado como desaparecido en Atsuma.
El número de heridos supera los 660. El domingo había alrededor de 2.600 personas refugiadas en centros de evacuación.
El desastre destruyó al menos 70 inmuebles.
Por otro lado, el transporte público se está restaurando gradualmente y el domingo los trenes de carga reanudaron sus servicios, motivo por el cual se espera que mejore la distribución de productos.
Con respecto al servicio eléctrico, la compañía Hokkaido Electric Power tuvo que cerrar la central térmica más grande de la prefectura tras el terremoto. El reinicio de sus operaciones podría llevar más de una semana.
Mientras se normaliza poco a poco el servicio eléctrico, la Agencia de Recursos Naturales y Energía instó a hogares y empresas a ahorrar energía apagando las luces y desenchufando los aparatos electrodomésticos cuando no se usen. (International Press)
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