«Realmente no sé lo que está sucediendo en este momento. De verdad siento que tengo que jugar otro partido mañana”, dijo, incrédula, la tenista japonesa Naomi Osaka tras conquistar el primer gran título de su carrera, el Indian Wells.
A la joven de 20 años, de padre haitiano y madre japonesa, le costaba creer que hubiera derrotado en la final del torneo a la rusa Daria Kasatkina 6-3, 6-2, quien había dejado en el camino a estrellas como Caroline Wozniacki y Venus Williams.
Naomi, por su parte, superó a Maria Sharapova y Simona Halep, entre otras rivales de renombre.
Es la primera vez que una japonesa gana el Indian Wells.
Con el título logrado, la japonesa saltará del puesto 44 al 22 en el ranking WTA.
«Estaba extremadamente estresada y extremadamente nerviosa. Mi plan era fingir que estaba muy tranquila”, admitió la japonesa en declaraciones recogidas por AP.
El nerviosismo no culminó con el partido. Tras su triunfo, nerviosa, bromeó diciendo que probablemente su discurso como campeona será “el peor de todos los tiempos”. Más adelante, dijo que la situación había sido muy embarazosa.
Naomi agradeció a sus padres tras su histórico triunfo.
La japonesa, que ganó 1.340.860 dólares por el título, vive en Florida. Nació en la ciudad de Osaka y a los tres años se mudó a Estados Unidos. Mide 1,80 m y en 2013 inició su carrera profesional. (International Press)
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