Las ventas de vehículos nuevos en Japón subieron un 5,3 % en 2017, que supuso su primer aumento en tres años, gracias a la sólida comercialización de modelos de estreno, informaron las asociaciones de distribuidores de vehículos.
Las ventas domésticas de coches ascendieron a 5.234.166 unidades el año pasado, después de haber caído por debajo de los 5 millones en 2016 por primera vez en un lustro, según las cifras publicadas por la Asociación de Distribuidores de Vehículos de Japón (JADA) y la Asociación de Vehículos Ligeros y Motocicletas de Japón.
Dicha caída estuvo motivada por el impacto negativo que tuvo en la venta de minivehículos el escándalo de manipulación de eficiencia energética protagonizada por Mitsubishi Motors, y que no parece haberse repetido con las irregularidades en las inspecciones de vehículos de Nissan Motor y Subaru reveladas a finales de 2017.
La comercialización de vehículos de Subaru se incrementó, de hecho, un 18,2 %, siendo el avance más notable del año, mientras que las de Nissan aumentaron un 5,9 %, según cifras de la JADA.
Las ventas de coches, excluyendo las de minivehículos, crecieron en conjunto un 4,5 % interanual en 2017, su segundo año consecutivo de aumento, hasta situarse en 3.390.824 unidades.
El fabricante Toyota Motor volvió a ser el año pasado líder del sector nipón, acaparando casi un 46 % de las ventas.
Toyota vendió en 2017 un total de 1.556.301 vehículos nuevos en el país asiático, lo que supone un 3,8 % interanual más.
Por su parte, las ventas de minivehículos (aquellos con motores de menos de 660 centímetros cúbicos) experimentaron su primer incremento en tres años hasta situarse en 1.843.342 unidades. (EFE)
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