Aequitas (justicia en latín) es el nombre de un movimiento antipobreza en Japón formado sobre todo por jóvenes, que exige que el salario mínimo en en el país asiático se eleve a 1.500 yenes (13,6 dólares) por hora.
Este colectivo, creado por estudiantes universitarios en 2015, logró reunir a unas 1.500 personas en las calles de Shinjuku en abril para difundir su reclamo.
Los manifestantes exigieron “reducir la desigualdad” y “no votar por políticos que son indiferentes a la pobreza”, informó la agencia Kyodo.
Una de las integrantes del grupo, Rie Fujikawa (25), dice que el salario mínimo promedio en Japón fue de 823 yenes por hora (7,46 dólares) en el año fiscal 2016, equivalente a unos 1,7 millones de yenes (15.420 dólares) por año (considerando una semana laboral de 40 horas), un nivel de ingresos que no permite ir ni siquiera a un hospital.
En cambio, con un salario mínimo por hora de 1.500 yenes, los trabajadores podrían ganar más de 3 millones de yenes (27.214 dólares) al año, un monto que les permitiría recibir los servicios médicos necesarios y mejorar su calidad de vida, dice la joven.
Fujikawa cuenta que deberá pagar 15.000 yenes (136 dólares) mensuales durante 30 años por un préstamo que solicitó para su costear sus estudios superiores. Cuando estaba en koko, su padre perdió su empleo por un accidente y ella tuvo que hacer arubaito.
Otro de los miembros de Aequitas es Shoji Hashiguchi (39), profesor a tiempo parcial en la Universidad Internacional de Osaka.
Hashiguchi dice que algunas empresas venden sus productos a precios muy bajos debido a la intensa competencia, y que debido a ello no les pagan a sus empleados como deberían.
El docente afirma que si los salarios son bajos, entonces los trabajadores gastan menos, afectando el consumo. A su juicio, si la remuneración sube a 1.500 yenes por hora, el consumo se fortalecerá, lo que a su vez ayudará a la economía. (International Press)
Quien no aprovecho la epoca de oro lamentablemente dificil poder ahorrar ahora para comprarse una casita .
Por aqui muchos se dedicaron al carrito, a la fiesta , al buen traje y aparentar lo que no son, luego con la crisis se dieron cuenta quer las casas estan tan caras en nuestro Peru que ahora lo unico que les queda es aguantar y quedarse caballero en este pais donde ser viejo es muy complicado y duro hasta para los mismos ponjas.
Y a los dekasegui ?…Que los parta un rayo!…Deben producirse también movimientos paralelos de protesta para que mejoren las condiciones de pago a los nikkeis que trabajan en Japón . Los sueldos que pagan las empresas japonesas cada vez son mas miserables , mientras estas llenan sus arcas con sus ventas. Definitivamente , Japón ya no es un país de oportunidades como lo era antes . He conversado con mucho jóvenes nikkei o no tan jóvenes también y todos coinciden en señalas que cada vez mas Japón se esta convirtiendo en un país intolerable para vivir con los míseros sueldos que están pagando .Donde están los dirigentes dekasegui para protestar en paralelo con los japoneses y hacer sentir de esta manera su voz de protesta frente a las situaciones actuales .Según tengo entendido , en las condiciones actuales el Japón del «sol naciente» ahora es del «sol poniente».