La Bolsa de Tokio cerró hoy plana, pese a los buenos datos económicos procedentes de Estados Unidos, debido a la recogida de beneficios que protagonizaron los inversores de cara al inminente final del año fiscal nipón.
El índice de referencia Nikkei avanzó 14,61 puntos, un 0,08 por ciento, y quedó en los 19.217,48 puntos; mientras que el segundo indicador, el Topix, que agrupa a los valores de la primera sección, perdió 2,76 puntos, un 0,18 por ciento, hasta las 1.542,07 unidades.
El principal índice del parqué tokiota se movió entre el terreno positivo y el negativo durante toda la jornada.
La confianza tras la vuelta a las ganancias en Wall Street tras ocho jornadas de caída se vio contrarrestada por la venta de títulos de cara a la paga de dividendos al cierre del ejercicio fiscal nipón de 2016, que concluye el 31 de marzo.
Wall Street cerró con ganancias tras conocerse que la confianza de los consumidores en la evolución de la economía estadounidense subió en marzo más de lo esperado.
Los principales exportadores nipones se vieron favorecidos por una caída del yen frente al dólar, que se produjo después de que el vicepresidente de la Reserva Federal (Fed), Stanley Fischer, afirmara que en lo que resta del año habrá probablemente otros dos incrementos en las tasas de interés de Estados Unidos.
Panasonic se alzó un 2,9 por ciento, Honda Motor subió un 1 por ciento y los títulos de Sony se revalorizaron un 2,7 por ciento.
Toshiba, por su parte, terminó un 1 por ciento al alza, minutos antes de confirmar que Westinghouse Electric, su unidad de energía nuclear en Estados Unidos, se ha acogido a la protección de la normativa estadounidense de quiebras.
En la primera sección, 1.158 valores retrocedieron frente a los 716 que avanzaron, mientras que 118 cerraron el día sin cambios.
El volumen de negocio ascendió a 2,159 billones de yenes (17.989 millones de euros), frente a los 2,415 billones de yenes (20.105 millones de euros) de la víspera. (EFE)
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