Noviembre del año pasado, prefectura de Fukuoka. Un casamiento está a punto de celebrarse: el novio, un sargento de la policía. Aparentemente, una ceremonia como tantas.
Sin embargo, la familia de la novia comienza a sospechar que hay gato encerrado: ¿dónde están los parientes del novio? ¿Por qué ningún familiar del policía está presente?
Para salvar la situación, el policía llama a un pariente. Este, sin embargo, creyendo equivocadamente que su familiar es víctima de un delito, llama a la policía para pedir ayuda.
Ahí se destapa todo. El hombre, acorralado, confiesa, ante su novia y los parientes de esta, que ya está casado.
El policía logró hacerle creer a la mujer que era soltero durante varios años, revela la agencia Kyodo.
El policía, un cuarentón cuya identidad no se ha hecho pública, declaró a sus colegas que la relación con la mujer se “alargó” y “resultó así”.
La policía de Fukuoka decidió castigar al hombre con un recorte de su salario.
Hasta el momento, la mujer no ha tomado ninguna acción contra el hombre. (International Press)
y QUE CHUCHA TIENE QUE METERSE EL EMPLEADOR EN LA VIDA PRIVADA DEL PATA QUE GOZO DE LO LINDO CON LAS DOS