El gigante tecnológico Toshiba anunció que podría contabilizar un deterioro de activos por valor de «varios miles de millones de dólares» relacionado con la compra en 2015 de una compañía estadounidense de energía nuclear.
La valoración final dependerá de la revisión contable que la empresa completará en el primer trimestre de 2017, según explicó la compañía con sede en Tokio en un comunicado.
La pérdida está ligada a la compra por parte de Westinghouse (propiedad de Toshiba desde 2006) de CB&I Stone & Webster, empresa que construye plantas atómicas.
Toshiba mantiene un contencioso con Chicago Bridge & Iron, de quien adquirió la empresa en diciembre de 2015, a cuenta de sus tasaciones de los activos y negocios de la compañía.
Las acciones de la empresa se devaluaron un 11,62 por ciento en la Bolsa de Tokio, después de que medios japoneses adelantaran la noticia.
Toshiba, que aún está saneando sus cuentas tras destaparse en 2015 un fraude contable orquestado por su antigua directiva, anunció su previsión de resultados para la totalidad del ejercicio -que en Japón concluye el 31 de marzo- el pasado mes de noviembre.
La empresa dice que publicará los datos revisados, incluyendo el impacto negativo del mencionado deterioro de activos, lo antes posible.
Según los datos de noviembre, Toshiba esperaba lograr un beneficio neto de 145.000 millones de yenes (unos 1.183 millones de euros/1.236 millones de dólares) para el presente año fiscal. (EFE)
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