El domingo 11 en la mañana, Chiharu Saku, una mujer de 35 años que reside en Chiba, le dio a su hija de cinco años una caja de leche de 125 mililitros para que bebiera.
La niña, que es alérgica a los productos lácteos, comenzó a desarrollar síntomas de alergia, como dificultad para respirar y baja presión arterial.
La mujer, que cria sola a su hija, llamó a los servicios de emergencia. La menor fue trasladada a un hospital, donde aún permanece. Su estado de salud ha mejorado.
Saku ha sido arrestada y acusada de intento de asesinato, informó Mainichi Shimbun.
La madre se ha declarado inocente, asegurando que no tenía intención de matar a su hija. La niña estaba siguiendo un tratamiento que le permitía tomar una pequeña cantidad de leche, según Saku.
Sin embargo, desde abril, la mujer fue varias a un centro de consulta infantil local para decir que estaba cansada de criar a su hijo.
En julio, Saku acudió a la policía para pedirle que se llevara a su hija porque ella no podía cuidarla. La policía, sospechando que la niña podía ser víctima de abuso, avisó al centro de consulta infantil en agosto, pero este consideró que la situación no era de emergencia, no como para separar a la niña de la madre por el riesgo que esta podría representar para la pequeña. Se equivocaron. Con intención o sin ella, casi la mata. (International Press)
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