Japón ordena suspender las obras de nueva base de EEUU en Okinawa

Okinawa alberga el 74 % de las instalaciones militares estadounidenses en el país

El primer ministro nipón, Shinzo Abe, ordenó hoy suspender las obras de construcción de la nueva base militar estadounidense de Futenma en la prefectura de Okinawa (suroeste), por las que mantiene una batalla legal con el Ejecutivo local.

«El gobierno ha decidido aceptar el plan de acuerdo (con Okinawa) propuesto por un tribunal», que incluye la suspensión de las obras, dijo el ministro nipón de Defensa, Gen Nakatani, en unas declaraciones recogidas por la agencia local Kyodo.

La Administración Abe mantiene desde hace meses una confrontación con el gobierno de la prefectura de Okinawa por el traslado de la base de Futenma desde su localización actual a la bahía de Henoko, al norte de la isla principal de la prefectura.

El Gobierno nipón había ordenado el pasado mes de noviembre seguir adelante con la construcción del nuevo complejo, pese a que el Gobernador de la prefectura de Okinawa, Takeshi Onaga, revocó poco antes la licencia de obras, un permiso que había sido concedido por el anterior Ejecutivo local.

El Gobierno central y el de la prefectura mantienen tres litigios en los tribunales por este asunto que podrían ahora quedar resueltos, ya que el plan de acuerdo propone que retiren todas sus demandas y emprendan nuevamente conversaciones para zanjar definitivamente la cuestión, según informó la cadena pública NHK.

Tokio acordó en su momento con Washington trasladar las instalaciones a Henoko, una zona menos poblada, con el fin de reducir su impacto sobre la población local.

Okinawa rechaza el traslado con el argumento de que supone una amenaza para el medio ambiente de la zona y una pesada carga para la población local, y demanda que la base se traslade fuera de la prefectura, con la aspiración de poner fin a la presencia militar estadounidense en la región.

La actual Futenma, de 480 hectáreas, se ubica en el mismo centro urbano de la localidad de Ginowan (94.000 habitantes), rodeada de viviendas y edificios públicos, lo que durante años ha generado protestas de sus ciudadanos por el ruido y por la posibilidad de que se produzcan accidentes.

Okinawa alberga a más de la mitad de los cerca de 47.000 efectivos que EEUU mantiene en Japón, así como el 74 % de las instalaciones militares estadounidenses en el país asiático. (EFE)