Koke anota gol olímpico
El Atlético de Madrid se adjudicó el amistoso contra el Sagan Tosu japonés, que terminó en empate (1-1) pero que los rojiblancos terminaron ganando por 1-4 en los penaltis, en un duelo en el que mostraron su capacidad combinativa pero carecieron de pólvora.
El extremo derecho japonés Tamura fue el artífice del empate en los últimos diez minutos del 0-1 que el Atlético cosechaba desde el minuto 18, gracias a un gol de saque de esquina directo de Koke Resurrección.
El Atlético de Madrid arrancó el partido aletargado, lo que permitió al conjunto japonés mostrar su capacidad combinatoria con el balón y aproximarse a los centrales rojiblancos: el montenegrino Stefan Savic y el francés Lucas Hernández, que no tuvieron inconvenientes para rechazar sus ataques.
Con la posesión japonesa, el Atlético se desperezaba a través de las faltas que recibían por las bandas Raúl García y Carrasco, ocupantes de las alas en el 4-2-3-1 que dispuso Simeone, con Torres en la punta, Óliver en el enganche, y Saúl y Koke en la medular.
En el minuto 18 llegaba el primer gol rojiblanco, que cambiaría totalmente la dinámica. Fue desde la esquina, con un centro de Koke al segundo palo que se fue envenenando hasta introducirse en las redes del meta nipón Fujishima, que no fue capaz de despejarlo.
Tras el tanto, se pudieron ver los mejores minutos rojiblancos, con Óliver Torres ejerciendo de 10, desplazándose por todo el centro del campo y buscando la combinación con sus compañeros. Junto a Saúl Ñíguez, y Koke, el Atlético mostró su mejor momento en cuanto a posesión pero le faltó pegada.
Un disparo lejano de Takahashi fue el único bagaje que pudo ofrecer el Sagan Tosu antes del descanso.
Tras el descanso, Simeone puso sobre el tapete a Juanfran Torres en lugar de Siqueira, y al francés Antoine Griezmann en lugar de Raúl García; ambos con molestias.
Con el veloz punta galo y la profundidad de Juanfran, el Atlético trenzó buenas jugadas, con una gran jugada del francés con doble pared con Koke y Torres, y posterior pase a Saúl, que puso el balón a Gámez en boca de gol, pero el andaluz no logró anotar.
Tamura, el que sería autor del gol final, había entrado tras el descanso y protagonizaba una buena ocasión local gracias a un buen pase al espacio de Yamasaki, pero el delantero nipón se anticipó al disparar y su balón se fue raso fuera de la meta de Moyá.
La conexión Juanfran-Griezmann por la derecha volcó el juego ofensivo del Atlético, con el francés pidiendo penalti en una jugada y a punto de provocar un gol de Vietto en otra, tras apurar la línea de fondo y ceder a Correa, que puso el balón en los pies de su compatriota aunque el portero japonés se le echó encima. Poco después Correa volvía a ceder atrás a Vietto, que obligó a Fujishima a poner el pie para evitar el gol en torno al minuto 68.
El partido bajó su ritmo a partir de entonces, lo que permitió al equipo local acumular más posesión.
Un arranque de velocidad de Tamura por la banda derecha, que superó a Gámez y se lanzó como una exhalación contra la meta de Moyá, que se vio sorprendido por un disparo que rebotó en Savic, puso el 1-1 para el conjunto local.
El Atlético se llevó el duelo en los lanzamientos desde el punto de penalti, después de que los jugadores japoneses fallaran el primer penalti y Moyá detuviera el segundo, en una serie de lanzamientos que finalizó Vietto anotando su penal a lo Panenka. (EFE)