La aerolínea japonesa All Nippon Airways (ANA) cancelará esta semana 335 vuelos, entre ellos 43 internacionales, tras suspender la semana pasada temporalmente las operaciones con sus Boeing 787 Dreamliner después de una serie de averías.
Las cancelaciones afectarán a más de 47.800 pasajeros, según detalló ANA en un comunicado, de los que unos 3.800 tenían previsto volar en rutas internacionales entre Tokio y San José (EE.UU.), Pekín o Seattle (EE.UU.).
La aerolínea nipona anunció la semana pasada su decisión de dejar en tierra sus 17 aviones 787 hasta nuevo aviso para inspeccionarlos, después de que uno de sus vuelos domésticos tuviera que aterrizar de emergencia por un fallo en una batería, el sexto problema detectado en un aparato de este modelo en solo dos semanas.
También la otra gran compañía aérea de Japón, Japan Airlines (JAL), decidió la semana pasada suspender al menos hasta el día 25 ocho vuelos internacionales entre Tokio y San Diego (EE.UU.) operados por sus 787, modelo del que cuenta con ocho aparatos.
Una serie de fallos en las baterías de los Dreamliner del estadounidense Boeing llevaron al propio fabricante a anunciar el pasado viernes que no realizará nuevas entregas de este avión hasta que la Agencia Federal de Aviación (FAA) certifique que se han resuelto los problemas.
Al menos dos de los incidentes se debieron aparentemente a problemas de sobrecalentamiento de unas novedosas baterías de iones de litio situadas en el morro del avión.
Mientras tanto, las 49 unidades del 787 que Boeing ha entregado hasta ahora a aerolíneas de Estados Unidos, Japón y Europa están en tierra hasta que se encuentre la causa de los seis problemas técnicos, principalmente de origen eléctrico, encontrados desde principios de este año. (EFE)