Destacaron Cuba, Brasil, Colombia y México
Gustavo Borges / EFE
El gimnasta brasileño Artur Nabarrete Zanetti cayó casi perfecto luego de una rutina de altos vuelos en las anillas, esperó unos segundos hasta que los jueces anunciaron sus altas calificaciones y se sintió campeón olímpico.
Fue la medalla número 500 en Juegos Olímpicos de América Latina que robó protagonismo con buenas actuaciones de nueve países de la región, encabezados por Cuba, con cinco preseas de oro, tres de plata y seis de bronce.
Aunque no se acercaron a sus mejores hazañas, los cubanos ganaron tres títulos olímpicos más que en Pekín 2008 y lo mejor fue que lo hicieron en cuatro deportes diferentes, boxeo, con el mosca Robeisy Ramírez y el ligero welter Roniel Iglesias, el luchador Mijaín López, la judoca Idalis Ortíz y el tirador Leuris Pupo.
Fue suficiente para superar a un Brasil que ganó tres medallas más que los caribeños, pero cayó en las finales de fútbol y voleibol masculino y ahí perdió el liderato de los latinoamericanos. Además del oro de Nabarrete Zanetti, Brasil tuvo sus mejores actuaciones con el oro de la judoca Sarah Meneses y el de la selección femenina de voleibol.
América Latina comenzó a cosechar triunfos en Londres pocas horas después de la ceremonia de inauguración cuando el colombiano Carlos Oquendo fue sorpresivo medallista de plata en la prueba de ruta del ciclismo, un aviso de lo que vendría para la nación sudamericana, con su mejor actuación de la historia por amplio margen.
Colombia ganó una medalla de oro de Mariana Pajón, en ciclismo BMX, tres de plata y cuatro de bronce. Si bien, la cosecha de ocho preseas no la esperaban ni lo mismos colombianos, todavía más notable es que fue en seis deportes distintos, ciclismo, atletismo, taekwondo, lucha, levantamiento de pesas y judo.
Otra nación que brilló en Londres fue México, no sólo por derrotar a Brasil en la final de fútbol, sino porque por primera vez en su historia ganó siete medallas fuera de su casa, una de oro, tres de plata y tres de bronce, con protagonismo de sus saltadores, con dos platas y un bronce y de los arqueros, con una plata y un bronce.
Los Juegos serán inolvidables para Guatemala que ganó medalla por primera vez con Erick Barrondo, subcampeón de la caminata de 20 kilómetros, pero también para la República Dominicana, con el oro del corredor de 400 metros con vallas Félix Sánchez, ocho años después de ganar Atenas 2004, y la del joven Luquelin Santos, en los 400 metros planos.
El oro en taekwondo de Eduardo Crismanich, en la división de 80 kilos de taekwondo, fue para Argentina un bálsamo luego de la derrota en la final de hockey de mujeres ante Holanda y se le escapara el bronce al equipo de baloncesto, mientras el título del esgrimista venezolano Rubén Limardo, en espada, puso a Venezuela en el mapa de los campeones olímpicos de los Juegos.
Fueron 58 medallas de latinoamericanos en Londres, pero la región perdió muchas preseas de manera reñida, lo cual deja preparado el camino para los Juegos de Rio 2016, en los que con todo a favor por ser locales, los latinoamericanos, si mantienen su línea de crecimiento, podrán acercarse al centenar de preseas.