Bailaor afirma que el público japonés está cada vez más “españolizado”
El bailaor Antonio Canales aseguró en Tokio que considera a Japón como «la segunda potencia en flamenco» después de España y definió al público nipón como «caluroso, respetuoso y entendido» y cada vez «más españolizado».
En declaraciones a Efe, el coreógrafo, que se encuentra en la capital nipona para ofrecer una serie de actuaciones, aseguró que «adora» Japón, «una plaza obligada» que él visita desde hace 26 años.
Para Canales (Sevilla, 1961), el nipón «es un público muy respetuoso, que ahora se pone eufórico aplaudiendo y sabe mucho más de flamenco. Eso no ocurría hace 20 años, cuando era mucho más frío», dijo.
El bailaor ofreció en el Instituto Cervantes de Tokio extractos del premiado espectáculo «Torero», que desde que echó a rodar en 1993 lleva ya cerca de 1.000 representaciones.
El acto coincide con la inauguración de la exposición en el Cervantes «Toros desde la Barrera», que reflexiona sobre la ética de la tauromaquia a través de 24 trabajos de prestigiosos fotógrafos españoles como Cristina García Rodero o Ramon Masats y la vídeoartista María Cañas.
Canales señaló que la muestra refleja «lo maravilloso, trágico y verdadero» de este arte a través de «las dos caras del toreo», y con su actuación, que incluirá un solo con un capote, pretende «reflejar ese mundo del toro».
El fin de semana el andaluz representará el «Bolero de Ravel» en el parque de Hibiya, en las inmediaciones del Palacio Imperial de Tokio, con bailaores españoles y japoneses en una actuación que será «un canto al pueblo japonés».
La obra estará dedicada a las víctimas del terremoto, tsunami y crisis nuclear que asoló el noreste de Japón el 11 de marzo de 2011, a las que donarán el 20 por ciento de la recaudación, y contará con elementos musicales que evocarán «el viento y el terremoto», dijo.
El bailaor, que cuatro meses después de producirse la tragedia viajó a las zonas afectadas a llevar en persona donaciones, aseguró que «fue un golpe muy duro ver la costa, los huérfanos y los hoteles convertidos en campamentos de campaña».
Tras su actuación en Tokio descansará unos días en la costa de Niigata (noroeste del país) para «disfrutar del mar, la comida y los buenos amigos» y practicar japonés, idioma que reconoció hablar «un poco», antes de regresar a España. (EFE)