Secuelas del terremoto y el tsunami del 11 de marzo
El grupo japonés de electrónica y maquinaria Hitachi ganó 16.265 millones de yenes (146,2 millones de euros) entre abril y junio, un 86 por ciento menos que el mismo periodo del año pasado.
Los resultados trimestrales se vieron fuertemente afectados por las consecuencias del gran terremoto del 11 de marzo en Japón y las restricciones energéticas posteriores, además de las interrupciones en la cadena de suministro de componentes, indicó el grupo.
Sus ingresos por ventas fueron de 2,15 billones de yenes (19.326 millones de euros), en línea con los obtenidos entre abril y junio del ejercicio anterior.
Pese a que la mayoría de los segmentos se vieron azotados por la catástrofe de marzo, Hitachi logró mantener los ingresos en el mismo nivel que el año pasado gracias, entre otras cosas, a los resultados de la firma de logística Vantec, que adquirió el pasado abril.
El grupo también destacó los «firmes ingresos» en su segmento de maquinaria de construcción, especialmente en países emergentes, y en el de sistemas de información y telecomunicaciones.
Las ventas de Hitachi fuera de Japón retrocedieron un 1 por ciento interanual, hasta 973.500 millones de yenes (8.705 millones de euros), según la compañía.
Mazda Motor multiplicó sus pérdidas
El fabricante japonés Mazda Motor tuvo una pérdida neta de 25.543 millones de yenes (229,6 millones de euros) entre abril y junio, doce veces más que el año pasado, aunque mantuvo su previsión de cerrar en positivo el año fiscal.
Las ventas del fabricante de Hiroshima en el trimestre pasado bajaron un 29,4 por ciento hasta los 408.132 millones de yenes (3.668 millones de euros) ante el descenso de la producción, dañada seriamente por el terremoto de marzo, indicó el grupo.
Entre abril y junio Mazda Motor, quinto fabricante japonés, vendió en todo el mundo 281.000 unidades, un 11,3 por ciento menos que en el mismo periodo del año pasado.
En Japón las ventas bajaron un 31,8 por ciento, hasta 35.000 unidades. En Norteamérica se redujeron un 4 por ciento hasta 86.000 unidades, al tiempo que en Europa lo hicieron un 18,5 por ciento, hasta 44.000 vehículos, pese al aumento del número de vehículos vendidos en Rusia.
En China, el volumen de ventas se mantuvo sin variación respecto al año pasado, en 53.000 unidades.
Pese a las consecuencias del desastre de marzo en Japón y la incertidumbre económica global, Mazda mantuvo invariables las previsiones de resultados difundidas en junio para este ejercicio fiscal, que concluye en marzo de 2012.
El fabricante automovilístico espera obtener un beneficio neto de 1.000 millones de yenes (8,9 millones de euros), frente a una pérdida de 60.042 millones de yenes (543 millones de euros) en el ejercicio 2010, que terminó el pasado 31 de marzo. (EFE)
Be the first to comment