
La alcaldesa de la ciudad de Maebashi, Akira Ogawa, reafirmó el pasado 13 de octubre su deseo de permanecer en el cargo, a pesar de la controversia que la rodea por haberse reunido en un «hotel del amor» en varias ocasiones con un empleado municipal casado.
Durante una asamblea de diálogo con ciudadanos organizada por sus partidarios, la alcaldesa apeló a la comprensión pública, argumentando que su «responsabilidad es avanzar con las promesas electorales» que hizo. Asimismo, reiteró su intención de tomar una decisión final sobre su futuro político en un futuro cercano, según informaron varias fuentes cercanas.
La alcaldesa Ogawa había expresado previamente su deseo de escuchar directamente la opinión de los ciudadanos antes de decidir su continuidad o renuncia. No obstante, la forma en que se llevó a cabo la reunión de diálogo plantea interrogantes sobre su rendición de cuentas.
De acuerdo con las personas relacionadas con el evento, la asamblea se limitó a unos 120 ciudadanos de Maebashi. Se realizó a puerta cerrada, en seis sesiones separadas de 50 minutos cada una, con un aforo limitado de 20 participantes por turno.
(Nota: La foto mencionada en la fuente original muestra a la Sra. Akemi Ogawa inmediatamente después de ganar las elecciones a la alcaldía de Maebashi. Esta no se puede incluir en este formato de texto.)
La alcaldesa de la ciudad de Maebashi, Akemi Ogawa, reafirmó el pasado 13 de octubre su deseo de permanecer en el cargo, a pesar de la controversia que la rodea por haberse reunido en un «hotel del amor» en varias ocasiones con un empleado municipal casado.
Durante una asamblea de diálogo con ciudadanos organizada por sus partidarios, la alcaldesa apeló a la comprensión pública, argumentando que su «responsabilidad es avanzar con las promesas electorales» que hizo. Asimismo, reiteró su intención de tomar una decisión final sobre su futuro político en un futuro cercano, según informaron varias fuentes cercanas.
La alcaldesa Ogawa había expresado previamente su deseo de escuchar directamente la opinión de los ciudadanos antes de decidir su continuidad o renuncia. No obstante, la forma en que se llevó a cabo la reunión de diálogo plantea interrogantes sobre su rendición de cuentas.
De acuerdo con las personas relacionadas con el evento, la asamblea se limitó a unos 120 ciudadanos de Maebashi. Se realizó a puerta cerrada, en seis sesiones separadas de 50 minutos cada una, con un aforo limitado de 20 participantes por turno. (IP/AG/IP)
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