
El gobierno japonés y la coalición gobernante están considerando un nuevo plan de ayudas económicas directas como respuesta al aumento del costo de vida. La propuesta contempla entregar entre 30.000 y 40.000 yenes por persona, con la posibilidad de aumentar ese monto para los sectores de menores ingresos, según fuentes oficiales citadas por Mainichi.
Un funcionario cercano al proceso señaló que el monto de 40.000 yenes es el escenario más probable, aunque la cifra definitiva dependerá del excedente de ingresos fiscales que se conocerá en julio. Si se confirma que el Estado recaudó más de lo previsto, eso servirá como fuente para financiar las ayudas.
El objetivo de la medida es aliviar el impacto de la inflación en los hogares, especialmente aquellos con mayor vulnerabilidad económica. Aunque un plan similar fue descartado en abril por las críticas de la oposición —que lo tildó de “populista”—, ahora el gobierno busca ajustar el esquema para que sea más focalizado y socialmente justificado.
PROPUESTAS COMPLEMENTARIAS
La coalición entre el Partido Liberal Democrático (PLD) y el Komeito aún está definiendo los detalles. Mientras que el Komeito propone utilizar el sistema de “My Number Points” para evitar que los fondos se destinen a ahorro en lugar de consumo, el PLD prefiere el enfoque clásico de transferencias en efectivo, por su rapidez e impacto directo.
“En un contexto donde muchas familias sufren por el alza de precios, el efectivo es lo más adecuado para aliviar la presión de inmediato”, afirmó el secretario general del PLD en la Cámara Alta, Masaji Matsuyama.
Ambos partidos esperan incluir el esquema de ayudas en sus propuestas oficiales para las elecciones de la Cámara Alta previstas en julio. Además, se llegó a un consenso político entre los secretarios generales del PLD y el Komeito de avanzar con la entrega de ayudas como política formal contra la inflación. La propuesta fue reforzada por declaraciones del presidente del comité parlamentario del PLD, Tetsushi Sakamoto, quien afirmó que “es lógico devolver a la población parte del excedente fiscal”.
El Komeito, por su parte, ha expresado su deseo de que los pagos se realicen antes de que finalice el año. La decisión final sobre el calendario, el monto exacto y los mecanismos de entrega se definirá en las próximas semanas. (RI/AG/IP/)
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