Una ola de robos de cables eléctricos de cobre, impulsada por el aumento de los precios del metal, está obligando a los operadores de granjas solares y otras empresas en Japón a cambiar a alternativas de aluminio. Este fenómeno se ha intensificado en 2024, con un incremento del 13% en el precio del cobre en Japón, alcanzando aproximadamente 1,44 millones de yenes (unos 9.250 dólares) por tonelada, según datos de JX Advanced Metals citados por el Nikkei.
El cobre, conocido por su excelente conductividad eléctrica, ha sido durante mucho tiempo el material preferido para el cableado de construcciones y para vehículos eléctricos.
Sin embargo, su encarecimiento, entre otras cosas por la debilidad del yen, ha llevado a un aumento del 16% en el precio de los cables CV de 14 milímetros, comúnmente utilizados en instalaciones de energía solar, que ahora cuestan alrededor de 591 yenes por metro.
Este incremento ha incentivado el robo de cables, con un récord de 19.465 casos reportados en los primeros 11 meses de 2024, según datos preliminares de la Agencia Nacional de Policía de Japón.
En 2024, los ladrones se han vuelto más audaces llegando a cortar cercas de protección e invadiendo edificios recientemente deshabitados para extraer cientos de metros de cable. Gran parte del botín termina en manos de compradores de metales reciclados, lo que ha llevado a las empresas a buscar alternativas más seguras y económicas.
EL ALUMINIO GANA TERRENO
Frente a esta situación, el aluminio ha emergido como una opción viable. Con un precio de alrededor de 2.600 dólares por tonelada en el mercado de futuros de Londres, el aluminio cuesta aproximadamente un 30% menos que el cobre. Además, los cables de aluminio suelen tener cubiertas azules para distinguirlos de los de cobre, lo que ha disuadido a algunos ladrones.
Las ventas de cables de aluminio han experimentado un fuerte crecimiento. Furukawa Electric, por ejemplo, registró un aumento del 35% en las ventas de uno de sus productos de cables de aluminio en diciembre de 2024. La compañía espera alcanzar ventas totales de 2.000 millones de yenes para el año fiscal 2024, que finaliza en marzo, y proyecta un incremento del 25% para el año fiscal 2025.
Marubeni, una importante empresa comercial japonesa, pronostica un aumento del 2,6% en la demanda global de aluminio y un incremento del 5% en su uso para fines eléctricos en 2025.
Sin embargo, los expertos explicaron que, desde el punto de vista de la pureza, es difícil utilizar aluminio reciclado para fines eléctricos, lo que probablemente aumentará la demanda de aluminio nuevo y presionará al alza los precios. (RI/NI/IP/)
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