La empresa Space One, responsable del proyecto, anunció la decisión media hora antes del despegue, señalando que los fuertes vientos hacían imposible proceder con el lanzamiento. El cohete también llevaba consigo el primer “templo budista espacial”.
En una rueda de prensa celebrada al mediodía, Space One explicó los detalles técnicos de la cancelación y prometió informar en los próximos días sobre la nueva fecha para el intento. Este proyecto busca posicionar un satélite en órbita, siendo un hito para el sector privado japonés.
El Kairos 2 representa un intento de redención para Space One, tras el fracaso de su primer cohete en marzo de este año. En aquella ocasión, la misión tuvo que ser abortada apenas segundos después del lanzamiento debido a problemas técnicos, que provocaron la activación del sistema de autodestrucción y una explosión en pleno vuelo. Ahora, nueve meses después, la compañía intenta superar los retos tecnológicos y meteorológicos que han puesto a prueba sus ambiciones espaciales.
El Spaceport Kii, ubicado en una región costera conocida por sus condiciones climáticas impredecibles, es clave en los esfuerzos de Japón por fomentar la participación privada en la industria aeroespacial.