El primer ministro japonés, Shigeru Ishiba, se reunió este 15 de noviembre con el presidente chino, Xi Jinping, en el marco de la cumbre APEC en Lima, Perú. Durante los 35 minutos de conversación, ambos líderes reafirmaron su compromiso de fortalecer la «relación estratégica de beneficio mutuo» entre ambos países, promoviendo un diálogo de alto nivel y una mayor cooperación en diversas áreas.
Ishiba expresó su intención de fomentar los intercambios al más alto nivel entre Japón y China, destacando la importancia de establecer una comunicación directa entre líderes para afianzar la relación bilateral.
Uno de los puntos centrales de la reunión fue la reanudación gradual de las importaciones de productos marinos japoneses en China, suspendidas desde el verano de 2023 tras el vertido de agua tratada de la planta nuclear de Fukushima. Ishiba resaltó la relevancia de que el propio Xi se refiriera al compromiso de reiniciar estas importaciones, lo que consideró una señal significativa. Además, mencionó que esta reanudación dependerá de la participación de China en las inspecciones del agua tratada por la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA).
La reunión, la tercera en tres años entre líderes de ambos países, se da en un contexto de crecientes tensiones geopolíticas y económicos, pero también en un momento clave para reforzar la cooperación bilateral. Xi Jinping, al inicio del encuentro, expresó su deseo de mantener la relación en un «curso correcto» y de lograr un desarrollo estable a largo plazo en medio de la incertidumbre en el panorama internacional. «Las relaciones entre China y Japón se encuentran en un punto crucial, en un periodo de mejora y desarrollo», señaló Xi.
Ishiba, por su parte, reconoció tanto las oportunidades como los desafíos que enfrenta la relación bilateral. «Existen amplias posibilidades de desarrollo entre Japón y China, pero también varios desafíos y cuestiones pendientes», afirmó el primer ministro japonés, quien destacó la importancia de fortalecer la comunicación en diversos niveles para reducir fricciones y potenciar la cooperación.
A pesar de las disputas en áreas como la defensa y el comercio, ambos países buscan ampliar sus lazos económicos y personales. China es el principal socio comercial de Japón, y Tokio depende en gran medida de la estabilidad de estas relaciones para el intercambio en sectores clave como el medio ambiente y la salud. Japón valora la cooperación china en temas internacionales y continuará impulsando la colaboración en estos frentes.
El primer ministro japonés también subrayó la importancia de restablecer el diálogo directo entre los líderes de ambos países. A raíz de las tensiones militares recientes, Ishiba expresó su preocupación por el creciente poderío militar chino y las incursiones en las aguas del Mar de China Oriental y Meridional. En agosto, un avión militar chino violó el espacio aéreo japonés por primera vez, y en septiembre, el portaaviones Liaoning navegó en la zona económica exclusiva de Japón. Ishiba transmitió a Xi sus «preocupaciones» por las actividades militares chinas en la región, así como por la postura de China respecto a Taiwán.
En relación con un trágico incidente en el que un niño japonés fue apuñalado en la ciudad de Shenzhen, Ishiba pidió a Xi una investigación exhaustiva y medidas para garantizar la seguridad de los ciudadanos japoneses en China. Xi respondió afirmando que China tomará todas las medidas necesarias para asegurar la protección de todos los extranjeros, incluidos los japoneses.
Ishiba ha mostrado interés en realizar una visita a Pekín próximamente, lo que marcaría un avance significativo en la reanudación de intercambios de alto nivel entre ambas naciones. La última visita de un primer ministro japonés a China fue en 2019, cuando Shinzo Abe asistió a una cumbre trilateral con Corea del Sur. Además, se espera que en 2025 Japón sea anfitrión de la próxima cumbre trilateral entre Japón, China y Corea del Sur, lo que supondría una nueva oportunidad para fortalecer los lazos bilaterales. (RI/AG/IP/)