La cotización del yen frente al dólar estadounidense experimentó una apreciación significativa hoy 16 de septiembre, alcanzando brevemente los 139 yenes por dólar, un nivel no visto en los últimos 14 meses. Este repunte ha llevado la moneda japonesa a su nivel más alto del año, impulsado por las expectativas de una próxima reducción de las tasas de interés en Estados Unidos, lo que ha provocado un estrechamiento en el diferencial de tipos de interés entre ambos países.
La posibilidad de que la Reserva Federal (FED) estadounidense anuncie un recorte sustancial en las tasas de interés en la reunión del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC) programada para los días 17 y 18 de septiembre ha sido clave en este fortalecimiento del yen. Los analistas del mercado consideran casi segura una rebaja de tipos, la primera en más de cuatro años, y las especulaciones ahora se centran en la magnitud de dicha reducción.
El informe de la inflación de agosto, publicado el 11 de septiembre, mostró una persistente presión inflacionaria en EE UU, lo que inicialmente condujo a una previsión de un recorte moderado de 0,25 puntos porcentuales. Sin embargo, el Wall Street Journal informó el 12 de septiembre que la FED podría optar por un recorte más agresivo de 0,5 puntos, el doble de lo anticipado. Esta noticia desencadenó un aumento en las expectativas del mercado, que ahora ven en un 60% de probabilidad que el recorte sea de 0,5%, frente a sólo un 10% antes de la publicación del artículo.
Durante la jornada de hoy, cuando el mercado bursátil de Tokio se encontraba cerrado por día festivo, el yen osciló en torno a los 140,80 yenes por dólar durante las primeras horas de la mañana. Sin embargo, la falta de actividad en el mercado japonés y el aumento de las expectativas de recorte de tipos en EEUU favorecieron una presión bajista sobre el dólar, que empujó al yen a su nivel más fuerte desde julio de 2023.
Este fortalecimiento del yen tiene implicaciones significativas para la economía japonesa, especialmente para los exportadores, quienes suelen verse afectados por una moneda fuerte que encarece sus productos en los mercados internacionales. No obstante, el estrechamiento de los diferenciales de tipos de interés entre Japón y Estados Unidos podría generar una mayor estabilidad en la cotización del yen a medio plazo.
Los inversores y analistas seguirán de cerca la decisión de la FED en los próximos días, ya que un recorte mayor de lo esperado podría acelerar aún más la apreciación del yen frente al dólar. (RI/NI/IP/)
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