Se denominan cafés para ancianos. Congregan a personas mayores que se juntan para socializar y comer, y su número está en aumento en Japón, donde cada vez más gente de avanzada edad vive sola.
En Tokio, el gobierno promueve su funcionamiento con subsidios.
Proporciona hasta 560.000 yenes (4.000 dólares) a cada establecimiento como parte de un plan de promoción de actividades gastronómicas para integrar a los ancianos, precisa Jiji Press.
El objetivo es prevenir el aislamiento social y promover la salud física y mental de las personas mayores.
La ayuda también cubre conferencias sobre salud y eventos para que interactúe gente de diferentes generaciones.
Hasta el momento los subsidios han beneficiado a cafés en los municipio de Meguro, Arakawa y Okutama. (International Press)