Argentina vivió ayer domingo una de las elecciones presidenciales más inciertas de las últimas cuatro décadas. Con el 98% de las papeletas escrutadas, los resultados mostraron a Sergio Massa, el candidato peronista, con un 36,6% de los votos, seguido de cerca por el ultraderechista Javier Milei, quien obtuvo el 30%. Patricia Bullrich, representando a la derecha, obtuvo un 23,8%.
Es un hecho que Massa, actual ministro de Economía, y Milei, el economista libertario, se disputarán la presidencia en segunda vuelta el próximo 19 de noviembre.
Esta contienda electoral, marcada por una campaña bajo la sombra de una aguda crisis económica y el auge de la ultraderecha, vio a un 74% del padrón electoral, unos 25,9 millones de argentinos, acudir a las urnas, aunque la participación fue menor en comparación con las elecciones de 2019.
RESISTENCIA PERONISTA
El peronismo ha demostrado su capacidad de resistencia y adaptación al obtener casi 2,5 millones de votos más en comparación con las primarias de agosto. Esta victoria representa un notable resurgimiento para el partido, pues en las primarias, 15 de las 24 provincias argentinas habían mostrado preferencia por Milei.
Sin embargo, el mapa se ha ido corrigiendo en los comicios de ayer con provincias como Tucumán, La Rioja, Río Negro, La Pampa y Santa Cruz volviendo bajo el paraguas azul peronista.
Durante la campaña, Massa ha buscado desmarcarse de la mala gestión económica del peronismo en el pasado, prometiendo estabilizar el país a través de inversiones en industrias locales y expandiendo la producción energética.
En medio de este escenario, surgió la figura de Javier Milei. Con un estilo directo, provocador y polémico, se posicionó como el rostro del liberalismo extremo en Argentina.
Su retórica, centrada en la eliminación del Banco Central y en propuestas radicales como abandonar la moneda nacional en favor del dólar estadounidense, ha encontrado resonancia en un sector del electorado que ve con escepticismo la intervención estatal en la economía. La crisis económica que vive el país, con una inflación que supera el 100% anual, ha servido de caldo de cultivo para las propuestas de Milei.
ALIANZA PARA LA SEGUNDA VUELTA
En un contexto electoral decisivo, Javier Milei, quien celebró su cumpleaños 53 el mismo día de los comicios, se presentó anoche en su búnker para pronunciar un contundente mensaje. «Dos tercios de los argentinos votaron por un cambio», exclamó, refiriéndose a la administración actual como un «gobierno de delincuentes».
Uno de los momentos más significativos de su discurso fue cuando Milei decidió hacer un llamado a la unidad entre las fuerzas de oposición. Reconociendo las tensiones y enfrentamientos previos, Milei propuso «barajar y dar de nuevo» para formar un frente sólido contra el kirchnerismo en la segunda vuelta electoral.
En este sentido, hizo un explícito planteamiento hacia una alianza con el movimiento «macrista» de Juntos por el Cambio, sugiriendo la necesidad de colaboración para lograr una verdadera transformación en el panorama político del país. (Jacinto del Piélago/ Para International Press)