Mateus Kenji de Souza Hashimoto, un brasileño de 28 años residente en la ciudad de Ota, prefectura de Gunma, ha sido acusado de vender drogas a cinco personas entre mayo y noviembre de 2022.
El hombre vendía las sustancias ilícitas -entre ellas marihuana- en su casa y utilizaba luces para comunicarse con sus clientes, revela Mainichi Shimbun.
Cuando la luz del pórtico de su casa era azul, significa que estaba disponible para vender la droga.
Si la luz de la entrada era roja, no.
El nikkei brasileño atraía a clientes a través de las redes sociales. La entrega de la droga se realizaba en la puerta de su vivienda.
Con los millones de yenes que se embolsicó, el joven compraba productos de marca y automóviles.
En su casa se encontró droga por un valor de calle de 5,09 millones de yenes (37.000 dólares).
Las policías de Gunma y Saitama, involucradas en el caso, están investigando cómo obtuvo las drogas. (International Press)