La policía de la ciudad de Oita recibió una llamada de emergencia de una farmacia.
Era viernes, alrededor de las 7:30 de la noche. Un hombre había robado en la tienda y huido.
La policía detuvo a un hombre cerca de la farmacia y comenzó a interrogarlo, revela Mainich Shimbun.
El sospechoso del robo, un cuarentón, le dijo a la policía que quería ir brevemente a su casa, que estaba cerca.
Los agentes aceptaron y lo acompañaron hasta su apartamento, situado en un cuarto piso.
De pronto, sin que los policías pudieron evitarlo, el hombre saltó desde el balcón de su vivienda y murió como consecuencia del impacto.
Un funcionario de alto rango de la policía local lamentó su muerte y dijo que investigarán las circunstancias del incidente así como del robo. (International Press)
