Yoko Ureshino, la mujer de 40 años que fue arrestada por el asesinato de su hija de 7 en la prefectura de Oita, había acudido a la policía en septiembre de 2021 en busca de consejo sobre la crianza de la niña.
“No sé cómo tratar a mi hija”, le dijo la mujer a la policía, según Mainichi Shimbun.
La policía derivó el caso a un centro de consulta infantil.
Además, en 2019, la policía, enterada de un caso de violencia doméstica que involucraba a la mujer, informó al centro de que la niña aparentemente era víctima de abusos psicológicos.
El martes, a las 7:25 a. m., la mujer llamó a la policía para confesar que había asesinado a su hija.
La policía halló a la niña, Ichika, acostada sin vida en un dormitorio.
No se detectaron huellas de lesiones o heridas. La policía está investigando la causa de la muerte de la estudiante de primer grado de primaria.
El crimen ocurrió alrededor de la medianoche del lunes. En el apartamento solo vivían madre e hija. (International Press)