Toyota Motor anunció hoy que su volumen de producción global para el año fiscal que finaliza en marzo de 2023 será inferior a los 9,7 millones de unidades previstas debido a la escasez de semiconductores.
La compañía ahora está examinando el número específico de unidades que producirá. En el año fiscal 2020 produjo 8,18 millones de unidades y en el año fiscal 2021 que finalizó en marzo pasado llegó a 8,56 millones de vehículos.
Este es el segundo año consecutivo que Toyota revisa a la baja su plan anual. En octubre de 2021, la fabricante japonesa recortó en 3% su producción respecto al año anterior, unas 300.000 unidades menos, debido a la propagación de la infección por el nuevo coronavirus en el sudeste asiático y la escasez de semiconductores. Posteriormente, en enero de 2022, anunció otra reducción del plan.
En mayo de este año, Toyota anunció planes para producir 9,7 millones de unidades en el año fiscal 2022. Sin embargo, debido al bloqueo de la ciudad de Shanghai, por el empecinado plan de COVID Cero dictado por el gobierno chino, las fábricas siguieron sin producir chips suficientes.
Toyota anunció planes para reducir su volumen de producción global en noviembre próximo a unas 800.000 unidades, afectando a 250.000 en Japón y 550.000 en el extranjero. Previamente, la empresa tenía previsto fabricar un promedio 850.000 unidades al mes entre octubre y diciembre, pero no será posible. (RI/NI/)
