El primer ministro de Japón, Fumio Kishida, anunció que el gobierno ayudará a las personas cuyo patrimonio ha sufrido daños por culpa de la Iglesia de la Unificación.
Para ello, presentará una legislación durante el actual periodo de sesiones de la Dieta, que culmina el 10 de diciembre, informó Kyodo.
Kishida realizó el anuncio el martes durante una intervención ante la Dieta, sin entrar en detalles sobre la legislación que impulsará.
Esta iniciativa se suma a la decisión del gobierno de investigar formalmente a la organización religiosa, criticada por arruinar a sus seguidores a través de millonarias donaciones o “ventas espirituales” (vende objetos, entre ellos jarrones, a precios astronómicos -bajo amenaza o coacción- para la salvación del alma o el karma).
El gobierno decidió abrir una línea de consulta para recibir llamadas de personas perjudicadas por la Iglesia. En 25 días atendió más de 1.700 casos. Alrededor de 70 han llegado a la policía.
Kishida advirtió de que la Iglesia podría haber violado la ley.
La Iglesia de la Unificación podría perder su condición de sociedad religiosa, con lo cual sería privada de beneficios fiscales. Sin embargo, podría seguir operando. (International Press)
