De alguna manera se venía venir. El CEO de Tesla, Elon Musk, anunció que rescindirá el contrato de compra de Twitter por 44.000 millones de dólares, aduciendo que la red social no ha proporcionado información real sobre la cantidad de cuentas falsas en la plataforma.
Los abogados de Musk dijeron que Twitter no había respondido o se había negado a responder a múltiples solicitudes de información sobre las cuentas falsas o spam, algo «fundamental para el desempeño comercial de la empresa».
Musk ya había advertido que suspendería el trato a menos que Twitter presentara pruebas de que dichas cuentas eran menos del 5% de los usuarios que ven la publicidad en la red social.
Entre tanto, se supo que Twitter está pensando emprender acciones legales contra el dueño de Tesla con la posibilidad de que la relación se convierta en una batalla judicial.
En las idas y venidas que rodearon el anuncio y negociación de la adquisición de Twitter, varias declaraciones de Musk afectaron el desempeño de la compañía en la bolsa de valores. El aviso de la cancelación del contrato provocó ayer una nueva caída del 6%. (AG/)
