Coca-Cola ha instalado en Japón sus primeras máquinas expendedoras de agua «sin botellas», es decir que están equipadas para llenar los envases de los clientes como parte de los esfuerzos de la compañía para reducir los desechos plásticos.
Las máquinas, instaladas a modo de prueba en Universal Studios Japan en Osaka y en las cafeterías de la fabricante de botellas isotérmicas Tiger Corp., sirven dos tipos de agua con gas, así como agua caliente, fría y sin gas a temperatura ambiente.
La iniciativa de sostenibilidad de Coca-Cola llega así a un país donde las máquinas expendedoras están todas partes y las botellas de refrescos representan el 6% de los desechos plásticos.
El agua tiene un precio de 60 yenes por 500 mililitros y las máquinas, que también ofrecen botellas reutilizables que se venden llenas a 260 yenes, tienen un sistema de lavado de botellas y vasos de los clientes.
Para 2025, Coca-Cola planea tener en Japón alrededor de 500 de estas máquinas llamadas Bonaqua Water Bar. La compañía se ha propuesto cambiar todas las botellas de PET a materiales 100% sostenibles hasta 2030. (NI/RI/)
