La policía de Yamanashi detuvo a un adolescente de 19 años como sospechoso del incendio provocado en una vivienda del barrio de Yomogisawa en la ciudad de Kofu, donde luego se encontraron dos cuerpos carbonizados, uno de los cuales fue identificado como Moriji Inoue de 50 años, el dueño de la casa.
El joven se entregó a la policía ayer por la noche y en su manifestación ha reconocido haber agredido a una de las dos hijas adolescentes de Inoue e «insinuó» haber provocado el incendio. El chico presentaba quemaduras en el rostro y una herida en la mano que requirieron de atención médica en el hospital. Asegura que actuó solo.
El hecho ocurrió alrededor de las 3.30 horas de ayer martes cuando la hija menor bajó al primer piso después de escuchar voces de una pelea. En la oscuridad vio a un hombre extraño que la atacó cerca de las escaleras y que la golpeó en la cabeza cuando intentaba huir.
Las hermanas escaparon por el balcón del segundo piso y alrededor de las 3.45 la mayor llamó a la policía comunicando que un ladrón había entrado a su casa a robar. Cinco minutos después empezó el incendio que consumió la casa de madera de dos pisos. Los vecinos dijeron que sintieron un “olor a querosene” después del incendio.
En las primeras investigaciones y antes de la entrega del adolescente, la policía procesaba manchas de sangre halladas en los alrededores de la vivienda, pisadas e imágenes de las cámaras de seguridad. Estaban detrás de un hombre de entre 20 y 30 años que había invadido la vivienda de los Inoue.
Cuando la casa aún ardía por el fuego, el sospechoso había sido visto por una patrulla policial que llegaba al lugar, pero no lo intervino. Poco después, los agentes salieron en su búsqueda hasta que llegaron a ubicarlo, pero cuando se aprestaban a acercarse el individuo se dio a la fuga. (AG/RI)
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