Los puntos débiles de las nuevas medidas japonesas contra el COVID-19: Dr. Ortega*

Desde que se iniciaron las Olimpiadas, cada día Japón ha batido un nuevo récord Olímpico por COVID-19, llegando el jueves 5 de agosto a la mayor cifra por día, en lo que va de la pandemia por SARS-CoV-2, con 15.263 nuevos infectados por coronavirus.

Las nuevas medidas Covid-19 anunciadas por el primer ministro Suga, el lunes 2 de agosto, han provocado sorpresa, incredulidad y marcada molestia en el gremio médico y población japonesa, cuando dijo: “solo los pacientes con COVID-19 que estén gravemente enfermos y aquellos en riesgo de llegar a ese estado serían hospitalizados, mientras que los demás se aislarían en sus hogares”. El ministro de Salud Tamura, apoyó la medida diciendo: “ A menos que tengamos suficientes camas, no podemos llevar personas a los hospitales”.

Definitivamente una nueva política del gobierno frente al coronavirus que denota una completa falta de prevención y preparación en logística, especialmente en número de camas hospitalarias, así como equipamiento y también falta de personal de salud disponible para proteger a la población infectada por COVID-19. Todas estas nuevas medidas que solo incrementarán desgraciadamente el número de muertos.

Ya entramos al vigésimo mes de pandemia por coronavirus y estamos en medio de la quinta ola, y  la experiencia en Japón nos dice, como hemos repetido innumerables veces, que cada nueva ola ha sido peor que la anterior en numero de infectados y muertos. No era tan difícil para el gobierno y sus asesores darse cuenta de la situación por pandemia en que nos encontramos y tomar las precauciones debidas a fin de proteger a su población, asegurándole a los pacientes con síntomas moderados, y aquellos con síntomas leves, pero dentro de la población en riesgo de hacer complicaciones ya sea por la edad o por la presencia de enfermedades crónicas, una hospitalización inmediata a fin de dar tratamiento preventivo y/o determinar cualquier signo que amerite un tratamiento especifico a complicaciones por COVID-19.

La experiencia en Japón, sobretodo en la cuarta ola, nos enseñó también que nos es buena idea dejar a los pacientes en su casa, ya que muchos se complicaron de un momento a otro y murieron en casa o en la ambulancia mientras buscaban una cama hospitalaria, en algunos casos durante más de 24 horas en la camilla de la ambulancia. Algo difícil de aceptar y tolerar, sobretodo por el tiempo que llevamos de pandemia y la poca acción al respecto de las autoridades, donde por decreto quitan ahora el soporte hospitalario a todos los pacientes Covid-19 de leves hasta moderados, sin que exista un sistema médico domiciliario adecuado, rápido y eficiente, con el personal disponible, para determinar en que momento un paciente pasa de enfermedad leve a moderado o grave.

CÓCTEL ANTICUERPOS COVID-19

Otro aspecto importante a considerar con estas nuevas medidas del gobierno es que el tratamiento preventivo a fin de evitar la hospitalización, enfermedad grave y complicaciones por el virus con los  anticuerpos monoclonales casirivimab y imdevimab (“cóctel de anticuerpos”) aprobados para su uso en Japón el 19 de julio 2021 por el Ministerio de Salud, serán de imposible aplicación para protección de la población ya que en Japón, para la aplicación de dichos medicamentos por vía endovenosa o subcutánea, se requiere que el paciente esté hospitalizado y el médico tratante solicite directamente los medicamentos al Ministerio de Salud, algo imposible de realizar si los pacientes permanecen en casa, y además por razones obvias los infectados no pueden acudir a la consulta externa para no infectar a otras personas.

Lo ideal sería autorizar su uso en forma ambulatoria, ya que su aplicación por vía endovenosa solo toma de 20-30 minutos.

Otra razón que explicaría que la aplicación de este “cóctel de anticuerpos” es imposible de usar bajo las nuevas medidas del gobierno, es el hecho de que los candidatos para su uso además de estar en la primera semana del inicio de enfermedad, no deben tener ningún síntoma de falta de aire o estar ya bajo el uso de oxígeno, algo que sabemos es frecuente en COVID-19, donde muchos pacientes hacen estos síntomas en casa y antes de acudir a los hospitales.  

Los anticuerpos monoclonales buscan evitar en pacientes infectados COVID-19 de alto riesgo, sin síntomas o síntomas leves, y que tengan algún riesgo ya sea por la edad, enfermedades crónicas u obesidad, de progresar a enfermedad severa u hospitalización.

El casirivimab y imdevimab son anticuerpos monoclonales de inmunoglobulinas humanas G-1 (IgG1), que son proteínas creadas en el laboratorio y que imitan la capacidad del sistema inmunológico para combatir patógenos como los virus. Se dirigen específicamente contra las proteínas pico S1 y S2 del SARS-CoV-2, diseñadas para bloquear la unión del virus y su entrada en las células humanas. Se puede usar en adultos y niños desde los 12 años que pesen más de 40 kilos. La dosis endovenosa o subcutánea recomendada, tan pronto como se tenga un PCR positivo y hasta los 10 días de infección en 20-30 minutos de aplicación, es de 1.200 mg en total, combinados con 600 mg de casirivimab y 600 mg de imdevimab. El uso de estos medicamentos en conjunto, disminuye el riesgo de hospitalización y mortalidad en 70% y acorta los síntomas del coronavirus en 4 días.

* El “cóctel de anticuerpos” se puede usar en pacientes:

a) Mayores de 60 años

b) Adultos de cualquier edad con hipertensión, enfermedad cardiaca, enfermedad pulmonar obstructiva crónica, cualquier otra enfermedad pulmonar.

c) Niños de 12-17 con más de 40 kg de peso, enfermedad cardiaca congénita o adquirida, enfermedad de células falciformes, trastornos del desarrollo neurológico, como parálisis cerebral, gastrostomía, traqueotomía o asma, vía aérea reactiva u otra enfermedad respiratoria crónica.

d) Diabetes mellitus

e) Obesidad con IMC mayor o igual a 35

f) Enfermedad renal crónica

g) Enfermedad inmunosupresora como el cáncer, trasplante de médula o de órganos, talasemia, VIH.

h) Con tratamiento inmunosupresor al momento de ser Covid-19 positivo.

i) Hipertensión.

j) Asma.

k) Enfermedad cardiovascular.

l) Enfermedad pulmonar crónica.

m) Enfermedad hepática crónica.

* El “cóctel de anticuerpos” NO se puede usar en pacientes:

1. Requieren terapia con oxígeno debido al COVID-19
2. Hospitalizados debido a complicaciones por COVID-19
3. Requieren un aumento de la tasa de flujo de oxígeno inicial debido a COVID-19.
4. Aquellos que reciben oxigenoterapia crónica debido a una enfermedad crónica no asociada a Covid-19.

Contrario a lo que dice el gobierno japonés, realizar las Olimpiadas Tokio 2020 han contribuido a que la población ignore los pedidos de “quedarse en casa”, ya que ver tantas cenas de gala ofrecidas por el gobierno a las autoridades internacionales y miembros del COI presentes para la inauguración, solo daban la falsa sensación a la población de que “se hacían las Olimpiadas porque era seguro y nada podría pasar”, como dijo el Presidente del COI, concepto y acciones erradas, ya que en la práctica vemos como se incrementan los casos de COVID-19.

El COVID-19 ya lleva un total de 200.269.244  infectados, con 4.257.056 muertes, y 4.270.915.082 dosis de vacunas administradas, en 221 países y territorios del mundo según datos del Centro de Sistemas, Ciencia e Ingeniería de la Universidad John Hopkins.

Sugerencias:

1. Declarar en Emergencia a todo el territorio de Japón.
2. Cancelar las Olimpiadas
3. Autorizar la creación de Hospitales de Emergencia en cada prefectura para atender pacientes COVID-19. (diversos países edificaron hospitales Covid-19 en 10 días durante la pandemia)
4. Autorizar el uso en forma ambulatoria de anticuerpos monoclonales casirivimab y imdevimab “cóctel de anticuerpos” en pacientes Covid-19, mayores de 12 años, sin síntomas y que estén en riesgo de enfermedad grave.
5. Prohibir el desplazamiento entre prefecturas de toda la población, a menos que sean trabajadores esenciales. Limitar todo transporte público.
6. Cerrar todas las tiendas de departamento del país, con áreas mayores a 500 metros cuadrados. Solo permitir apertura a las que venden comestibles.
7. Cerrar todos los bares y restaurantes las 24 horas del día. Solo permitir el “delivery” de alimentos preparados.
8. Limitar al 30% el trabajo presencial en todas las empresas.
9. Incrementar y facilitar las pruebas moleculares de PCR en la población general.
10. Autorizar y acelerar la vacunación contra el Covid-19 de toda la población desde los 12 años, involucrando a todos los hospitales, clínicas, colegios, institutos, universidades, empresas y defensa nacional.