Una visita cuya trascendencia no habría cruzado los límites de la ciudad de Nagoya tuvo repercusión nacional en Japón debido a un exceso del alcalde de la capital de la prefectura de Aichi.
El miércoles, el alcalde de Nagoya, Takashi Kawamura, recibió en el municipio a la medallista olímpica Miu Goto, miembro del equipo de sóftbol de Japón que ganó el título de los Juegos Olímpicos de Tokio tras derrotar a Estados Unidos.
Durante el acto, Goto puso la medalla alrededor del cuello de Kawamura. El alcalde la agarró, dijo «es pesada», y de pronto, sin pedir permiso a la deportista o avisarle, mordió la medalla, relata Kyodo.
El alcalde fue ampliamente criticado en las redes sociales, donde lo acusaron de «falta de respeto» hacia la campeona olímpica, así como de «falta de conciencia en medio del aumento de casos de coronavirus (en Japón)», entre otras cosas.
Kawamura recibió palos hasta del fabricante de coches Toyota, propietario del equipo donde juega Goto.
En un comunicado público, el gigante del motor se sumó a quienes calificaron como “falta de respeto” el gesto del alcalde, y añadió que fue un “acto indigno”.
«Realmente esperamos que (el alcalde) se comporte como un líder», subrayó Toyota.
Ante el alud de críticas, Kawamura ofreció disculpas. “Lo siento si causé algún problema». El alcalde intentó explicar su conducta, calificándola como una “expresión de afecto”. (International Press)
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