El 18 y 19 de marzo, cuando Tokio se encontraba en estado de emergencia por el coronavirus, el gobierno de la capital japonesa emitió órdenes a 32 restaurantes para que recortaran sus horarios de atención con el fin de contener el virus.
Sin embargo, cuatro de ellos desoyeron al gobierno de Tokio y continuaron operando, como lo pudo comprobar un patrullaje nocturno realizado por funcionarios gubernamentales.
Los cuatro negocios podrían ser multados por recomendación del gobierno metropolitano de Tokio, según Mainichi Shimbun.
Un tribunal determinará si ordena a los restaurantes pagar multas de como máximo 300.000 yenes (2.700 dólares).
Las sanciones económicas contra los establecimientos se amparan en el artículo 45 de una ley de medidas especiales contra el virus en Japón.
Las autoridades de Tokio no han hecho públicos los nombres de los cuatro negocios para que el público no los visite.
En la capital de Japón se levantó el estado de emergencia el 21 de marzo. No obstante, el gobierno tokiota ha solicitado a bares y restaurantes que cierren a las 9 de la noche. (International Press)
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