¿Aplazar nuevamente los Juegos de Tokio? “Absolutamente imposible»

Cuando el año pasado se decidió posponer los Juegos Olímpicos de Tokio para julio de 2021 debido a la pandemia de coronavirus, parecía que la situación para entonces estaría controlada.

Sin embargo, a poco más de seis meses de su inauguración (23 de julio), con Japón atravesando por una tercera ola (la peor de todas) y países como Estados Unidos y Reino Unido registrando cifras récord de infectados y muertes, las cosas están fuera de control (aunque las vacunas anuncien la paulatina salida de la crisis sanitaria).

¿Es posible entonces aplazar nuevamente los Juegos?

Para el jefe de comité organizador de los Juegos Olímpicos de Tokio, el ex primer ministro de Japón, Yoshiro Mori, es «absolutamente imposible».

En declaraciones recogidas por Kyodo, Mori señaló que posponer la competición deportiva no es una opción pues muchos funcionarios que desempeñan un papel clave en los preparativos son prestados por otras organizaciones, entre ellas el gobierno metropolitano de Tokio.

Mori admitió que la incertidumbre afecta a todo, pero enfatizó que continuarán adelante con los preparativos. «Siempre habrá un mañana, incluso después de una larga noche. Trabajemos juntos para superar este gran desafío».

Japón aún no ha decidido si permitirá la entrada de público extranjero para que asista a los Juegos. Dependerá de la situación de la pandemia en los próximos meses, según Mori.

La determinación del jefe del comité organizador contrasta con la abrumadora posición de la ciudadanía japonesa: el 80,1 % está en contra de que se celebren en julio (piden su cancelación o un nuevo aplazamiento), mientras que solo el 14,1 % ciento está a favor de que se realicen en las fechas pactadas, de acuerdo con un sondeo de Kyodo.

En diciembre pasado, en el gobierno japonés se discutió la posibilidad de exonerar a los asistentes extranjeros a los Juegos del requisito de cuarentena de 14 días a su ingreso a Japón si provenían de países con relativamente pocos casos de virus.

Sin embargo, desde entonces la situación ha empeorado, incluyendo a Japón. (International Press)