El Departamento de Justicia de EEUU demandó este martes a Google de monopolio al utilizar ilegalmente su poder en el mercado para obstaculizar a sus rivales. El hecho podría llevar a la ruptura de una empresa que se ha convertido en sinónimo de Internet con un papel central en la vid diaria de millones de personas en el mundo.
No obstante, esta batalla judicial tarde años en resolverse. Aún así no tiene precedentes desde que EEUU demandó a Microsoft por prácticas anticompetitivas en 1998. El otro hecho judicial antimonopólico ocurrió en 1974 contra AT&T que llevó a la ruptura del sistema Bell.
Según la agencia Reuters, 11 estados se unieron a la queja del gobierno federal contra Alphabet Inc., que alega que Google actuó ilegalmente para mantener su posición en la búsqueda y la publicidad en Internet.
Se espera que en noviembre, Texas presente una demanda por separado centrada en la publicidad digital, mientras que Colorado está contemplando un demanda mucho más amplia contra Google.
La demanda ocurre un año después de que el Departamento de Justicia y la Comisión Federal de Comercio comenzaran las investigaciones antimonopolio de las 4 grandes empresas de tecnología: Amazon.com, Apple, Facebook y Google.
“En ausencia de una orden judicial, Google continuará ejecutando su estrategia anticompetitiva, paralizando el proceso competitivo, reduciendo las opciones del consumidor y sofocando la innovación”, dijo la demanda.
LA DEMANDA
Google es señalada por acaparar casi el 90% de todas las consultas de motores de búsqueda generales en los Estados Unidos y el 95% de las búsquedas en dispositivos móviles.
Según el fiscal general, Bill Barr, se ha descubierto en las investigaciones para la acusación que Google no compite en la calidad de sus resultados de búsqueda, sino que compró su éxito mediante pagos a fabricantes de teléfonos móviles y otros.
Se denuncia que Google gastó miles de millones de dólares para que las fabricantes de teléfonos inteligentes como Apple, Samsung, entre otras, utilicen su motor de búsqueda de forma prederminada.
Google calificó la demanda como “profundamente defectuosa” y sostuvo que la gente “usa Google porque así lo desea, no porque se vea obligada a hacerlo o porque no pueda encontrar alternativas”.
Los inversores parecieron ignorar la noticia de la demanda. Las acciones de Alphabet subieron un 1,9% a 1.563,51 dólares por cada una.
Tras la demanda, hay quienes han querido ver cálculo político a pocas semanas de las elecciones presidenciales fijadas para el martes 3 de noviembre. Los republicanos suelen quejarse de que las empresas de redes sociales, incluido Google, toman medidas para reducir la propagación de sus puntos de vista en las plataformas.
Los legisladores republicanos han buscado de varias maneras utilizar las leyes antimonopolio para obligar a las grandes tecnológicas a detener sus supuestas limitaciones.
ANTECEDENTES
La Unión Europea multó en 2019 a Google con US$ 1.700 millones por impedir que los sitios web utilicen a sus rivales para encontrar anunciantes. En 2018 le impuso también US$ 4.600 millones por bloquear sus rivales en su sistema operativo Android y en 2017 le penó con US$2.600 millones por favorecer a su propio negocio de compras en las búsquedas. (Agencias)
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