Una tailandesa de 41 años fue arrestada por la policía en Tokio tras confesar que había asesinado a sus dos menores hijos.
La filicida, identificada como Ruedeeporn Furukawa, apuñaló el lunes a su hijo Junichi, de 13 años, y su hija Saki, de 10, en la vivienda de la familia en la ciudad de Musashino. La mujer empleó dos cuchillos para asesinar a sus hijos, revela Mainichi Shimbun.
La tailandesa acudió a un koban para confesar sus crímenes. Acto seguido, la policía fue al apato de la familia y halló los cuerpos ensangrentados de los niños.
El esposo de la mujer, un japonés de 38 años, vive en otro lugar por trabajo.
La tailandesa dijo a la policía que entre su cónyuge y ella había disputas por la custodia de los niños. Su esposo tenía la intención de llevarse a los dos hijos si ambos se divorciaban, lo que la empujó a quitarles la vida, según ella.
La mujer los mató mientras dormían.
Una persona vecina expresó su sorpresa por los crímenes pues, dijo, Furukawa “adoraba a sus dos hijos». (International Press)
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