El gobierno de la ciudad de Busan, la segunda más grande de Corea del Sur, suspenderá sus programas de intercambio con Japón, informó Jiji Press.
La ciudad también prohibirá las visitas de sus funcionarios a Japón para tareas oficiales.
Busan mantendrá las medidas hasta que mejoren las relaciones entre ambos países, deterioradas por la decisión de Japón de restringir las exportaciones de materiales semiconductores a Corea del Sur.
Mientras que Japón sostiene que la decisión obedece a razones de seguridad, Corea del Sur afirma que es una represalia por los recientes fallos de la justicia surcoreana contra compañías japonesas por demandas sobre trabajos forzosos durante la ocupación colonial de Corea por parte de Japón.
Busan explicó que su objetivo es llamar la atención sobre la “injusta” medida de Japón y expresó su intención de sumarse al esfuerzo nacional del gobierno de Corea del Sur para dejar sin efecto las restricciones.
La ciudad surcoreana promueve activamente intercambios con municipios de Japón, especialmente ciudades hermanas en las prefectura de Yamaguchi y Fukuoka, según la NHK.
Busan también tenía un acuerdo de intercambio con la prefectura de Nagasaki. (International Press)
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