«Me disculpo por crear confusión en medio de una tensa situación parlamentaria», dijo Hayashi en declaraciones recogidas por AFP, aludiendo a los escándalos de amiguismo y acoso sexual que golpean al gobierno de Japón.
“Serviré al público de una manera más disciplinada. Debería haber trazado una línea entre lo público y lo privado, a pesar de que este caso estaba en línea con las reglas», agregó. Los ministros pueden usar vehículos oficiales para fines privados si están en medio de compromisos públicos.
Sin embargo, Hayashi aclaró que solo tomó clases de yoga y recibió masajes con presión de dedos, negando cualquier otro tipo de servicio. El ministro dijo que visitó el estudio para mejorar su salud.
El caso salió a la luz a través de la revista Shukan Bunshun, que informó de que el sitio al que fue Hayashi es dirigido por una ex actriz porno y ofrece clases privadas de yoga y masajes con aceite.
La mujer que dirige el estudio dijo que nunca fue actriz porno y exigió que la revista se rectifique y disculpe por presentar una “imagen indecente” de su negocio. (International Press)
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