El gobernador de Okinawa, Takeshi Onaga, acudió a los Ministerios de Asuntos Exteriores y de Defensa de Japón para protestar por la caída de la ventana de un helicóptero militar de Estados Unidos en el patio de una escuela de primaria en la ciudad de Ginowan.
Onaga exigió a ambos ministerios que insten con firmeza a EEUU a inspeccionar todas sus aeronaves militares y suspender todos sus vuelos, informó Mainichi Shimbun.
«Muchos okinawenses están indignados y he venido a transmitir sus sentimientos», dijo Onaga.
Pese a la demanda de Okinawa de suspender todos los vuelos, el mismo día en que el gobernador protestaba en Tokio un helicóptero y un avión Osprey volaron sobre la escuela en la que cayó la ventana. Solo una cerca separa al colegio de la base militar de Futenma.
El vicegobernador de Okinawa, Moritake Tomikawa, calificó como “extremadamente deplorable” que EEUU haya decidido no suspender sus vuelos. “Estados Unidos ha ido en contra de las peticiones del gobierno de Okinawa, lo cual no podemos permitir”.
Con respecto a la escuela, al día siguiente del incidente 17 niños faltaron a clases. Uno de ellos, un alumno de segundo grado, estaba en el patio cuando la ventana cayó. El niño dijo que tenía miedo y que se sentía mal. (Internatonal Press)
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