El 9 de febrero de 2016, la enfermera Yoka Ishikawa (50) asesinó a su suegra golpeándola en la cabeza con un objeto contundente, según la policía. El crimen tuvo lugar en una zona montañosa en la ciudad de Hayama, prefectura de Kanagawa.
El cuerpo de la víctima, Taki Ishikawa (81), fue encontrado al día siguiente por otros parientes de la anciana.
Yoka vivía con su suegra en la casa de esta, a aproximadamente1,5 kilómetros de la escena del crimen.
La enfermera, con la complicidad de su hijo de 27 años, también incendió la vivienda de su suegra al mes siguiente de asesinarla.
Yoka fue arrestada el mes pasado por el incendio y ahora ha sido acusada de asesinato, revela Tokyo Reporter. La mujer asegura que no tuvo ninguna relación con la muerte de su suegra.
Su hijo también fue arrestado.
La policía sostiene que madre e hijo le prendieron fuego a la casa para cobrar el pago del seguro contra incendios. (International Press)
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