Las autoridades niponas prosiguieron con la búsqueda de 30 personas que desaparecieron durante las lluvias torrenciales que han arrasado la isla de Kyushu (suroeste), mientras que el número de víctimas mortales de la catástrofe asciende a 18.
La Agencia Meteorológica nipona (JMA) mantuvo la alerta en las prefecturas de Fukuoka y Oita, las dos más afectadas por el desastre, y en otras áreas de Kyushu, debido a que se prevén más lluvias intensas por un nuevo frente en la zona y a la posibilidad de que se produzcan corrimientos de tierra e inundaciones.
Más de 10.000 efectivos del Ejército, policías y bomberos continúan con las tareas de búsqueda y rescate de la treintena personas que siguen desaparecidas en Fukuoka y Oita, según informaron las autoridades locales.
Además, las fuerzas aéreas niponas emplean helicópteros para transportar alimentos, agua y otros suministros a localidades enteras que continúan aisladas por las inundaciones en Oita, según recoge la cadena estatal NHK.
Unas 250 personas se encuentran aisladas en las dos citadas prefecturas, mientras que 1.700 personas siguen alojadas en refugios temporales de las cerca de 500.000 a las que las autoridades recomendaron abandonar sus hogares desde el pasado jueves.
La Agencia Meteorológica de Japón advirtió de que las lluvias suponen uno de los mayores desastres naturales en el país en las últimas décadas.
Las inundaciones y crecidas de ríos se han llevado por delante viviendas, tramos de carreteras locales, vehículos, vías de tren e incluso puentes, entre otras infraestructuras.
Las autoridades niponas han reabierto muchas de las carreteras y vías férreas que resultaron bloqueadas o cortadas durante el desastre, y están tratando de calcular el impacto económico que éste ha tenido, según informó la agencia local Kyodo. (EFE)
Be the first to comment